Si estás pensando en renovar el aspecto de tu vivienda o simplemente necesitas cambiar tus persianas por otras más nuevas, hoy te traemos un modelo que no siempre se toma en cuenta en un primer momento.

Hablamos de las persianas venecianas, un tipo de cubierta que en los últimos años se ha modernizado para adaptarse a las necesidades de los propietarios. Veamos cuáles son sus ventajas y los principales materiales que se emplean en su fabricación.

¿Qué son las persianas venecianas?

Se trata de las típicas persianas que verías en cualquier oficina. Desde su invención en el siglo XVIII se han utilizado preferentemente en entornos profesionales, si bien es cierto que su evolución ha permitido incorporarlas en los hogares.

Están compuestas por lamas flexibles conectadas entre sí por uno o varios cordones con los que se abren y cierran controlando el paso de luz. El grosor de los listones varía en función de las necesidades de cada cliente y del material que elijan (madera, aluminio, estireno, entre otros), y puedes encontrarlos tanto verticales como horizontales.

Además, la multitud de diseños y acabados las convierte en el complemento perfecto de toda habitación. No importa si tu vivienda se encuadra en un estilo moderno, industrial o rústico: hay alternativas para todos los gustos.

Tipos de persianas venecianas

Los materiales que se emplean en la fabricación de estas cubiertas para ventanas son muy diversos. Cada uno cubre una serie de necesidades estéticas y funcionales, y se dividen por lo general en dos grandes grupos: madera y aluminio.

Persiana veneciana de madera

Si buscas dar un toque de elegancia a tu vivienda, esta es la persiana que necesitas. Por su calidad, presencia y funcionalidad, no es de extrañar que sea la opción por excelencia de la mayoría de clientes.

No solo protege eficazmente de los rayos de sol, sino que además se considera un buen aislante térmico. Su grosor es más ancho que el de otros materiales como el aluminio, garantizando una gran resistencia ante la deformación.

Eso sí, al ser un material natural requiere de un mantenimiento algo más específico para que su aspecto sea como el del primer día.

Combina muy bien con estancias que siguen la línea de lo nórdico o lo rústico, dando ese punto de calidez y personalidad tan necesario en la vivienda.

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Persiana veneciana de aluminio

Las realizadas en aluminio se emplean sobre todo en ambientes «de batalla» como el baño o la cocina puesto que son muy resistentes, flexibles y duraderas. También aguantan a la perfección humedad y calor.

Además, son más sencillas de limpiar que las de madera, algo importante a tener en cuenta al tratarse de zonas de tránsito y trabajo constante.

Son perfectas para ambientes de estilo moderno e industrial, dando un aspecto fresco a la par que profesional.

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Ventajas de las venecianas

Además de cubrir totalmente la cuestión práctica, hay otras ventajas que las hacen interesantes y merecedoras de consideración.

– Se pliegan como un acordeón, quedando totalmente recogidas y aportando una gran sensación de amplitud al espacio.

– La variedad de tamaños de los listones permiten adecuar el grosor a la cantidad de luz que necesitas tapar de manera puntual o permanente.

– Hay una enorme amplitud de colores y acabados, tanto mate como brillo. Existen incluso modelos que imitan la madera natural sin los cuidados que este material implica.

– Su instalación es posible en todo tipo de ventanas ya que pueden fabricarse a medida.

– Tienen poco mantenimiento y son muy fáciles de limpiar.

– Aunque el precio puede oscilar considerablemente en función de los materiales y calidades escogidas, podrás encontrar venecianas económicas sin ningún problema.

– Si alguien de la familia es alérgico a los ácaros, son más convenientes que los estores o las cortinas ya que no acumulan tanto polvo como los textiles.

– Los listones son oscilantes, por lo que podrás regular el paso de la luz a tu antojo.

Aspectos a considerar

Antes de instalar una persiana veneciana, hay que analizar el modo de apertura de la ventana que pretendes tapar. Si se trata de una ventana abatible, ten en cuenta que la veneciana deberá estar de 7 a 15 cm por encima del alto para que se pueda abrir en su totalidad. Si por el contrario es corredera, podrás colocarla en el límite de la ventana ya que no afectará a su apertura.

En cuanto al ancho, lo ideal es que mida 10 centímetros más por cada lado excepto si tu ventana está retranqueada; en este caso puedes encargar una persiana cuyas dimensiones coincidan con la del vano sin miedo a miradas indiscretas procedentes del exterior.

Las persianas venecianas son el remate que toda ventana necesita. Ten en cuenta que van a tener un uso constante, por lo que es muy importante que las compres en comercios especializados como el nuestro, donde te garanticen su dureza, resistencia y calidad.